Publicado en Saber Sin Fin el 9 de febrero de 2017
Virgen y Mártir católica y Patrona de la Odontología y los Dentistas.
Santa Apolonia nace en Alejandría (Egipto) en una familia de la clase alta, alrededor del año 200 de nuestra era. Según se sabe, sus padres eran paganos y justamente por ello, la nombraron Apolonia en honor al Dios Apolo.
La vida de Apolonia transcurre siempre participando activamente en la Catequesis de Alejandría (Didascalia). Se conoce que se le consideraba una Virgen Sacerdotisa y que eran muy reconocidas sus virtudes de castidad, piedad, caridad, austeridad y limpieza de corazón.
En tiempos del Imperio Romano y bajo el régimen del emperador Filipo El Árabe, se dieron diversas persecuciones a los cristianos. En ellas se practicaban torturas y asesinatos que generaron muchos mártires católicos, que preferían la muerte antes que renunciar a su fe cristiana.
Justamente, la vida de Apolonia culmina en dicho marco, como resultado de una feroz paliza en la que sus captores la amarraron y le instigaban a que renunciara a su fe y blasfemara. Pero ella no sucumbió frente a los terribles golpes, que entre otras cosas terminaron destrozándole la boca. Ante las amenazas de quemarla viva y encendiendo una hoguera para dicho propósito, Apolonia solicita que la soltaran para pronunciar sus últimas palabras.
De dicho modo y luego de confirmar su fé en Cristo, ella sostiene que su martirio serviría para aliviar de los dolores de muelas a las personas y con dicho fin, sugiere a los que sufriesen dichos padecimientos bucales que la invoquen para interceder ante el Todopoderoso. Así, Apolonia ofrece su martirio y posteriormente, se lanza a las llamas. Como no moría incluso estando dentro de la hoguera, sus captores terminan degollándola.
De dicho modo, muere en el año de 249 D.C. Sus restos fueron recogidos por sus compañeros cristianos y sus dientes se mantienen como reliquias en algunas Iglesias, mientras que su cabeza se mantiene en la Iglesia de Santa María Trastévere en Roma.
Fuente: Ortodoncia Integral.
Redacción: Museo de Odontología BUAP.