miércoles, 4 de septiembre de 2019

Hogares con menos ingresos pagan sus deudas con más deudas


BOGOTÁ D. C., 02 de septiembre de 2019 — Agencia de Noticias UN-


El investigador Juan Sebastián Contreras, magíster en Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), comenta que los hogares en el quintil más bajo (1 en una escala de 1-5, donde 5 es el de mayores ingresos) de la distribución por ingreso –menos del 1 %– tienen casi el 20 % de la deuda de los créditos bancarios, y aclara que en su estudio no se tuvieron en cuenta las figuras del “gota a gota” ni el crédito informal.

Agrega que “los estudios sugieren que estos hogares se endeudan para responder a los choques de ingreso y gasto, y para hacer inversiones en educación o mejoramiento de vivienda”.

Además se observa que en los hogares del quintil inferior (1) el nivel de incumplimiento es mayor: 31,2 %, pues solo el 68,8 % declaran que están al día con sus pagos; en contraste, el 82,9 % de los hogares en el quintil superior (5) declaran de estar al día.

Entre tanto, ante una mayor oferta de crédito y una pérdida de ingreso entre los hogares del quintil inferior, aumenta el nivel de endeudamiento. “Los hogares tratan de mantener su nivel de consumo recurriendo al crédito, lo que explica por qué, aunque el efecto neto sigue siendo negativo, no es una reducción proporcional con respecto al aumento del consumo de los hogares con mayores ingresos”, subraya el magíster.

País desigual

Así mismo comenta que “Colombia es un país profundamente desigual; de hecho tiene el segundo coeficiente de Gini (índice de desigualdad de ingresos) más desigual de Latinoamérica (0.52). El 1 % más rico de la población tiene 20,4 % de los ingresos del país”.

Según el estudio, la desigualdad se mantiene debido a que la proporción del ingreso que tiene en su poder el 1 % más rico de la población pasa del 20,4 al 21,3 % en el largo plazo.

El magíster explica que el aumento del ingreso en la población de menores ingresos tiene dos destinos: por un lado, hay una variación amplia del consumo, que ronda el 5,5 % en el largo plazo, y por el otro un aumento en la oferta de productos de crédito en el sector bancario.

Para el estudio se emplearon dos aproximaciones: primero, se hizo un análisis de la Gran Encuesta Integrada de Hogares del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), que captura información sobre los niveles de endeudamiento de los hogares y sus comportamientos frente a la deuda.

En segundo lugar, se empleó un modelo de equilibrio general dinámico y estocástico (DSGE) con dos tipos de hogares: unos de mayores ingresos y otros de menores, con el propósito de analizar el impacto de choques de ingreso, desigualdad y crisis, sobre los agregados macroeconómicos.

Con este estudio, el investigador señala que existe una relación entre macroeconomía y desigualdad, ya que “la política macroeconómica puede ampliar o disminuir los niveles de desigualdad; y la desigualdad puede obstruir los objetivos de la política macroeconómica”.

Fuente: agenciadenoticias.unal.edu.co