viernes, 22 de junio de 2018

Antecedentes históricos de los endopostes (Primera parte)


22 de junio de 2018

Los primeros postes prefabricados que se utilizaron fueron los postes de aleaciones metálicas. Para mejorar las propiedades mecánicas y la resistencia a la fractura de los postes prefabricados metálicos y colados, surgieron los postes prefabricados reforzados de resina. Los primeros que surgieron fueron los postes prefabricados reforzados de fibra de carbono.


Posteriormente, la industria ideó una forma de mejorar la estética de los postes de fibra de carbono, añadiéndoles un recubrimiento de cuarzo, haciéndolos a la vez, más fuertes y resilentes. A continuación, aparecieron los postes prefabricados de cerámica, que pretendían mejorar las propiedades estéticas y mecánicas de los postes de fibra de carbono. Más recientemente, surgieron los postes prefabricados de fibra de vidrio, mejorando las propiedades mecánicas de los postes de fibra de carbono y con una estética similar a los postes de cerámica.

Kobayashi y Col: Los sistemas de poste núcleo se han empleado en odontología por más de 250 años. En 1728 Pierre Fauchard describió el empleo de postes metálicos atornillados en las raíces de los dientes para retener la prótesis (tenons). En 1740 Claude Hounton público su diseño de corona de oro con un poste de oro que se colocaba dentro del conducto radicular. En el siglo XVIII el uso de una corona que consistía en un poste de madera ajustado en una corona artificial (pivote). Durante este periodo se desarrolló también la corona Richmond, una corona retenida por un poste con un frente de porcelana que funcionaba como retenedor de un puente.

Después de varias décadas de este tipo de coronas fueron reemplazadas por poste núcleos colados confeccionados como entidad aparte de la corona. Esta técnica en dos fases permitía una adaptación marginal superior y no limitaba el trayecto de la inserción de la corona, además permitía reemplazar restauraciones deterioradas sin tener que retirar el poste. La dificultad de la técnica para la confección de un espigo colado metálico perfecto y las frecuentes fracturas radiculares ocasionadas por la falta de resistencia del metal llevaron a la búsqueda de nuevas alternativas.

En 1990 Dure definió las características del espigo ideal, el cual debería presentar forma similar al volumen de estructura dental perdido, propiedades mecánicas similares a la de la dentina, exigir mínimo desgaste de la estructura dental, ser resistente para soportar el impacto masticatorio y presentar módulo de elasticidad próximos a la estructura dental. Para cubrir esta necesidad surgieron espigos no metálicos que por presentar diferentes características de los espigos metálicos poseen algunas ventajas tales como la resistencia a la fatiga y a la corrosión, biocompatibilidad, estabilidad y preservación de la dentina radicular mejorando la integridad del remanente.

Kantor y Pines: En 1977 encontraron que los dientes tratados endodonticamente sin pernos eran dos veces más resistentes a la fractura comparado con aquellos dientes restaurados con pernos intraconducto, además, encontraron que los dientes sin pernos generalmente se fracturan en un nivel donde la reparación es posible, mientras que los dientes con pernos se fracturan en la raíz, convirtiendo las reparaciones en una tarea difícil o imposible.

Museo de Odontología de la BUAP
Imagen: Internet.