lunes, 9 de octubre de 2017

Historia de la Odontopediatría


Publicado originalmente en Saber sin Fin el 6 de marzo de 2017

Hipócrates, nacido en Cos (460-377 a.C.),  habla sobre la dentición, que en forma de sentencias populares muestra abundantes datos sobre creencias populares en cuanto a la erupción, las encías, fiebres, convulsiones y diarreas, que precedían o acompañaban a la erupción dental; así como las anomalías en la posición de los órganos dentales.


Siglo II:
Claudio Galeno Nicon, en el ámbito de la odontopediatría, aconsejaba frotar los dientes de los niños con tallos vegetales aromáticos, pero creía que los dientes eran parte de los huesos que recibían infracción a través del cerebro y utilizaba una lima para reducir los más prominentes.

Siglo XV:
En España, aparece el libro más antiguo consagrado en parte a la Odontopediatría, obra de la que es autor el palestino Francisco Martínez, dentista de Felipe II, publicada en Valladolid en 1557, concretamente el 20 de marzo.

Siglo XVII:
En Francia, la odontología conoció un esplendor particular con Pierre Fauchard, padre de la odontología moderna, en el que ofrece una descripción correcta de las 20 piezas de la dentición temporal demostrando que poseían raíces desarrolladas y que debajo de éstas se encontraban los gérmenes de los dientes permanentes.

Siglo XVIII:
Nace el padre de la odontología moderna, Robert Bunon, quien hace hincapié en la prevención, observación y experimentación. En el aspecto preventivo indica que la mujer ya embarazada debe cuidarse con una buena alimentación para que los dientes de su hijo estén bien formados.

En 1901 se establece en Nueva York la primera clínica de asistencia odontopediátrica por los miembros de la Rochester Dental Society.

En 1927 se impulsa la creación de la Asociación Norteamericana de Odontología Infantil.

En los años setenta se analizaba la posibilidad de implementar medidas preventivas copiando el modelo de los países desarrollados como la fluoración del agua potable y la sal, reduciendo así el índice cariogénico.

Imagen: deltadent.es

Redacción: Museo de Odontología BUAP.