Fernando Acosta se adentra en un fascinante análisis sobre el fenómeno contemporáneo que ha llevado a muchas sociedades a un estado de reminiscentes características de la Edad Media.
A través de su enfoque, examina cómo ciertos aspectos de la vida moderna, como la polarización social, el resurgimiento de ideologías extremas y la decadencia del diálogo civil, evocan un pasado donde la superstición y la ignorancia prevalecían.