21 de febrero de 2020
En el mundo, cerca de dos mil 895 lenguas vivas están en riesgo de desaparecer en este siglo. “El escenario es desgarrador”, afirmó Cecilia Rojas Nieto, del Instituto de Investigaciones Filológicas (IIFL) de la UNAM.
“Como si se tratara de un reloj biológico, se estima que cada dos semanas desaparece una lengua, pues se pierde el último de sus hablantes”, destacó la también académica del Centro de Lingüística Hispánica de la Facultad de Filosofía y Letras.
En el marco del Día Internacional de la Lengua Materna, que desde 2002 se conmemora el 21 de febrero para promover el multilingüismo y la diversidad cultural, dijo que “el lenguaje es un fenómeno intrínsecamente humano, pero algunas lenguas son un producto cultural en peligro”. Son una de las más frágiles creaciones del ser humano, que permanece en tanto haya hablantes que las usen como medio de comunicación habitual en todo tipo de situaciones y medios.
Los aproximadamente siete mil 500 millones de personas que pueblan la Tierra hablan cerca de siete mil doscientas lenguas, pero la distribución de los hablantes no es equitativa.
La experta expuso que un puñado de lenguas tiene millones de hablantes; en contraparte, millares de lenguas tienen menos de 10 mil hablantes. “Dos mil 895 lenguas -cerca del 40 por ciento– tienen menos de mil hablantes y están en peligro de desaparecer, mientras que 23 lenguas son habladas por más de la mitad de la población mundial”, remarcó.
“La permanencia de una lengua depende de que haya quién la conozca, la utilice y la transmita de generación en generación”. El fenómeno de lenguas sin hablantes es un resto arqueológico, y sólo cuando se habla, se interpreta, lee o escribe, vuelve a vivir.
Las lenguas mayoritarias como el inglés, chino mandarín, hindi y español, desplazan gradualmente a lenguas minoritarias. Los hablantes de lenguas minoritarias relegan el uso de su primera lengua, la que escucharon y aprendieron de sus padres en el seno de su comunidad, hasta el punto de dejarlas prácticamente en el olvido.
En México, abundó Rojas Nieto, las lenguas originarias –en nuestro territorio suman 68 agrupaciones lingüísticas– paulatinamente son desplazadas con el uso del español.
“Para que permanezcan es indispensable que se transmitan de manera continua y activa de padres a hijos. Lamentablemente cada vez es más frecuente que este proceso sea interrumpido. Esto se transparenta en reportes del INEGI sobre el uso de lenguas originarias entre los menores de edad: el porcentaje de hablantes en el grupo etario de 5 a 9 años es menor que en el grupo de 10 a 14”.
La especialista en adquisición del lenguaje abundó que los niños empiezan a usar en casa la lengua mayoritaria y a desplazar la originaria, muchas veces por la decisión paterna de impulsarlos a hablar español, pues consideran que les brindará un mejor medio de vida. “Atrás de esta decisión está la inequidad, la falta de respeto y la abierta discriminación hacia lo indígena”.
Migración lingüística
Los hablantes de lenguas mayoritarias favorecemos que las minoritarias se reduzcan y eventualmente desaparezcan. En nuestro país, los hablantes migran no sólo geográficamente, sino de lengua, subrayó.
Rojas Nieto refirió que en estudios de sociolingüística de la Universidad de Arizona se ha encontrado que entre hablantes del náhuatl se presentan actitudes contrapuestas respecto a su lengua: la valoran por vincularlos a sus tradiciones, pero a la vez consideran que no les conviene hablarla si pretenden insertarse en sistemas más favorables de supervivencia.
Es necesario reducir y eliminar los motivos que conducen a la ambivalencia de los hablantes, así como crear conciencia social y fortalecer en la educación el respeto a la diversidad. Además, en las comunidades se deben tener escuelas y maestros bilingües, pues de otro modo “se favorece el desplazamiento lingüístico”, sentenció.
En la actual lucha por el respeto a la diversidad, se debe incluir la diversidad lingüística; es responsabilidad de todos, pues es la decisión y la acción individual lo que hace que el mundo cambie, sostuvo.
El Día Internacional de la Lengua Materna está dedicado a reconocer y promover la diversidad lingüística y fortalecer los medios para mantenerla. Es una fecha para tomar y crear conciencia de la diversidad multilingüe de nuestro país y de la responsabilidad que tenemos para su conservación, concluyó.
Boletín UNAM-DGCS-159/2020