25 de septiembre de 2019
El derecho de expresión es actualmente uno de los más condenados en redes sociales, pues estamos condicionados a emitir un juicio “políticamente correcto”, en otras palabras, debemos pensar dos veces antes de hacer una afirmación o señalar algo que esté o no a favor de nuestra manera de pensar.
Pero vamos a un punto más allá de lo visible, cuando se hacen juicios o comentarios a través de redes sociales, que expresan explícitamente el punto de vista del sujeto en cuestión, pero lo hace a través de una página, un perfil falso, entre otras artimañas.
Pero profundicemos en esto, cuántas veces hemos estado en una historia, o transmisión en donde tenemos plena necesidad de expresarnos como quisiéramos hacerlo, pero por miedo a la represión que el punto de vista expuesto contraiga… silenciamos esas ganas.
Sin embargo, hay personas sin escrúpulos que SENTENCIAN o REPRUEBAN haciendo juicio en torno a un tema, a través de esos trucos antes mencionados, y reciben reacciones entre positivas o negativas, o imaginemos aquellos que sí se atreven a hacerlo público… sin el temor aparente de “el qué dirán”, más bien adrede para crear polémica.
Incendiarios inconscientes que bajo la protección que sienten tras de un monitor, simplemente sueltan comentarios llenos de ODIO y sin ningún sentido… como si de pedradas se tratasen.
Reflexionemos ante esto, pues es fácil compartir un meme hiriente, asumiéndose fieles entendedores de un “humor negro”, o decir comentarios misóginos; que tal asumirnos juez y parte de un caso que se expone, o sentirnos en tecnicismos perfectos para opinar en torno a un tema… entre otras cosas.
Interrogantes como: ¿Es de valientes decir lo que pensamos tal como lo pensamos sin remordimiento a la opinión pública? Expresiones como: “Denle una cerveza a ese muchacho”, ¿realmente son héroes o valientes? Resumiré la respuesta en la palabra RESPETO y lo que se debe entender por él, si bien es cierto que todos tenemos el DERECHO de pensar como nos venga en gana, también tenemos la OBLIGACIÓN de respetar el punto de vista de otros, pues aunque seamos individuales y sea tu “Facebook” por citar una red social en específico, en realidad estamos inmersos en un entorno social… SEAMOS CONSIENTES no fomentemos la intolerancia, ni aplaudamos compartiendo imágenes que pueden herir susceptibilidades, o como quien dice, no lancemos pedradas, para luego esconder la mano…