miércoles, 24 de abril de 2019

La salud no se compra


La salud es la riqueza real y no piezas de oro y plata.  

Mahatma Gandhi 




La Organización Mundial de la Salud (OMS), organismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), especializado en gestionar políticas de prevención, promoción e intervención en salud a nivel mundial, al realizar en el año de 1948 la Primera Asamblea Mundial de la Salud, propuso que se estableciera un “Día Mundial de la Salud”. En virtud de que la Constitución de la OMS entró en vigor el 7 de abril de 1948, se seleccionó este día y desde 1950, el Día Mundial de la Salud se ha celebrado de manera continua. 

La OMS define la salud como “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. La cita procede del Preámbulo de la Constitución de la Organización Mundial de la Salud, que fue adoptada por la Conferencia Sanitaria Internacional, celebrada en Nueva York del 19 de junio al 22 de julio de 1946, firmada el 22 de julio de 1946 por los representantes de 61 Estados y entró en vigor el 7 de abril de 1948. La definición no ha sido modificada desde 1948. 

Cabe recordar que la OMS se fundó sobre la base del principio de que todas las personas deberían poder hacer efectivo su derecho al grado máximo de salud que se pueda lograr. Por lo tanto, la “Salud para todos” ha sido la visión que los ha guiado a lo largo de sus más de setenta años de existencia y ha sido el motor de la iniciativa impulsada por la OMS y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para ayudar a los países del mundo a avanzar hacia la salud universal.  

La cobertura sanitaria universal es el objetivo primordial de la OMS y para lograrlo es fundamental que todas las personas puedan tener la atención que necesitan, cuando quiera que la necesiten, en el seno mismo de la comunidad. Se está avanzando en este ámbito en países de todas las regiones del mundo. Sin embargo, millones de personas siguen sin acceso alguno a la atención de salud. Y muchas personas, que se cuentan también por millones, se ven obligadas a elegir entre la atención de salud y otros gastos cotidianos, como alimentos, vestidos o incluso un techo. 

Salud universal significa que todas las personas tengan acceso, sin discriminación alguna, a servicios de salud integrales de calidad cuándo y dónde los necesitan, sin enfrentarlas a dificultades financieras. Para que una comunidad o un país pueda alcanzar la cobertura sanitaria universal se han de cumplir varios requisitos, a saber: a) un sistema de salud sólido; b) un sistema de financiación de los servicios de salud; c) acceso a medicamentos y tecnologías esenciales; d) personal sanitario bien capacitado. 

De acuerdo a la OMS en la actualidad la salud en el mundo tiene los siguientes referentes: 1. El riesgo de que un niño muera antes de cumplir 5 años es ocho veces mayor en la Región de África que en la Región de Europa de la OMS; 2. Cada día mueren cerca de 800 mujeres por complicaciones del embarazo y el parto; 3. Más de 10 millones de personas mueren antes de cumplir 70 años por enfermedades cardiovasculares y cáncer; 4. Se calcula que en el mundo hay 2,500 millones de personas en riesgo de ser infectadas por el virus del dengue; 5. En la Región del Pacífico Occidental de la OMS, casi la mitad de los hombres adultos son fumadores; 6. Los países de ingresos altos tienen un promedio de casi 90 enfermeras y parteras por cada 10,000 habitantes, mientras que algunos países de ingresos bajos tienen menos de 2 por 10,000 habitantes. 

Los Estados Miembros de la OMS (193 estados miembros y dos miembros asociados) se han fijado el objetivo de desarrollar sus sistemas de financiación sanitaria para garantizar que todas las personas puedan utilizar los servicios sanitarios mientras están protegidas contra las dificultades económicas asociadas al pago de estos. Sin embargo, todavía al menos la mitad de la población mundial no tiene acceso a los servicios de salud que necesita, lo que empuja a millones hacia la pobreza al tener que pagar de su bolsillo gastos en salud. 

Es por ello, amable lector, que el acceso a cuidados de calidad y a la protección financiera no solo mejora la salud de las personas y su esperanza de vida, sino que también protege a los países de las epidemias, reduce la pobreza y el riesgo de padecer hambre, crea empleos, impulsa el crecimiento económico y promueve la igualdad de género.  

Feliz Día Mundial de la Salud en su aniversario número 71, celebrémoslo cuidándonos.  


Jorge A. Rodríguez y Morgado 
Twitter @jarymorgado 

jarymorgado@yahoo.com.mx 

conoSERbien; www.sabersinfin.com