30 de marzo de 2018
Las personas tranquilas y silenciosas son las que tienen las mentes más fuertes y ruidosas.
Stephen Hawking
Stephen Hawking
En las primeras horas del miércoles 14 de marzo de este año, muere uno de los científicos más prestigiosos y unos de los divulgadores más populares de las últimas décadas -Stephen Hawking. Él fue el autor de buena parte de los descubrimientos de la astrofísica moderna como son: la nueva teoría del espacio-tiempo o la radiación de los agujeros negros.
Sus descubrimientos revolucionaron la Física del siglo XX abriendo nuevos horizontes a la investigación y ayudaron a formular y profundizar teorías como la del Big Bang, que explica el origen del Universo. Se esforzó por llevar la ciencia a las masas, con explicaciones sencillas de hechos interesantes, escribiendo dos libros para niños en conjunto con su hija.
Físico teórico, astrofísico, cosmólogo y divulgador científico británico, Hawking, nacido el 8 de enero de 1942 en Oxford, Reino Unido, se crió en una familia de intelectuales; su padre, Frank Hawking, médico experto en la investigación de enfermedades tropicales, catedrático del University College de Oxford, y su madre, Isobel, realizó estudios de Filosofía, Política y Economía. Fue el mayor de cuatro hermanos, tuvo dos hermanas menores, Philippa y Mary, y uno adoptivo, Edward.
Hawking desarrolló su carrera académica en la Universidad de Cambridge. Desde allí despegó como un eminente profesor de física para convertirse en una celebridad universal. Estaba considerado como unos de los científicos más influyentes desde Albert Einstein, no solo por sus decisivas aportaciones al progreso científico, sino también por su constante preocupación por acercar la ciencia al público y su coraje frente la enfermedad degenerativa que padecía y que le postró en una silla de ruedas desde muy joven.
Desde los 22 años padeció de esclerosis lateral amiotrófica (ELA), enfermedad que le fue limitando cada vez más sus movimientos, pero esto no fue motivo por el que dejara de investigar, Hawking nunca redujo su trabajo científico, pese a que el diagnóstico era que viviría sólo hasta los 24 años. A los 32, fue una de las personas más jóvenes en ser aceptadas como miembro de la Royal Society, la asociación científica más antigua del planeta, fundada en 1660.
Decían de Hawking que tenía una mente maravillosa atrapada en un cuerpo discapacitado. Su enfermedad neurodegenerativa progresiva le condenó a estar postrado en una silla especial para él. En 1985 perdió la voz y desde entonces se comunicó a través de un sintetizador de voz. Gracias a este ordenador pudo seguir ofreciendo conferencias y divulgando sus conocimientos. Creía que el futuro de la humanidad estaba en el espacio y sus augurios eran un tanto catastróficos.
Hawking estuvo casado y divorciado dos veces y procreando tres hijos. La BBC lo incluyó en la lista de los 100 británicos más influyentes de la historia. Ocupa el lugar 25. Darwin está en el cuarto lugar, Newton en el sexto puesto y Fleming en el 20. Pese a ser uno de los científicos más importantes del siglo, nunca ganó el Premio Nobel.
Con ideas muy claras y gran capacidad de síntesis, en 1988 escribió el libro de divulgación científica “Breve historia del tiempo, del Big Bang a los agujeros negros”. Desde que fue publicado su texto. Éste se mantuvo cuatro años y medio entre los 50 más vendidos del Reino Unido, de acuerdo con las listas del periódico londinense The Sunday Times.
El nacimiento de Hawking concuerda justamente cuando se cumplían 300 años de la muerte de Galileo Galilei. Así mismo, la muerte del físico británico, ocurrida a la edad de 76 años, también coincide con el día nacional del "Pi" (14 de marzo), en el que científicos y matemáticos celebran el valor de este número. Las coincidencias con la muerte de Hawking no terminan allí. La numerología aprecia que el número "Pi" -3.14- concuerda con la fecha en la que falleció el físico británico: el tercer mes del año (marzo) y el día 14. El 14 de marzo es también la fecha en la que nació el famoso físico Albert Einstein, quién murió a los 76 años, misma edad con la que fallece Hawking.
Entre las numerosas distinciones que le fueron concedidas, recibió doce doctorados honoris causa y fue galardonado con la Orden del Imperio Británico en 1982, el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 1989, la Medalla Copley en 2006, la Medalla de la Libertad en 2007 y el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en 2015.
Sea esta entrega un pequeño homenaje a este gran hombre.
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