5 de octubre de 2018
Si tu mundo es tuyo, entonces compártelo, sí, compártelo, enséñale a tu mundo la falta de seres que quieren pertenecer a él, la carencia de amor.
Tu mundo está lleno de amor, lleno de caricias, lleno de sonrisas, lleno de la paz, lleno de miradas, lleno de ternura, lleno de respeto y tolerancia, sí, de todos esos valores que te caracterizan, lleno simplemente de la base de la felicidad.
Y si llegan seres que quieren ver tu mundo, anda ve y enséñales la vida de tu mundo brillante, anda ve, corre y verás ¡qué inmenso es dar amor!
Enséñales tu lado tan oscuro y también tu lado lleno de luz de ese ser brillante, no te cuesta nada… ve.
Enséñales tu lado cruel y también tu lado cursi, donde todo es ciencia ficción e ilusión.
Enséñales tus pensamientos absurdos y ridículos, aunque para ser exactos te hacen la vida de diferente manera y divertida.
Sí, enséñales tu corazón, ábreles la puerta y no la cierres hasta que estés seguro de que no te falta nada, aunque para ser honestos siempre te faltará algo, pero ábrela sin temor alguno.
Ábreles tus labios y diles cuanto te hacían falta, diles también que los añorabas y los deseabas con toda la eternidad.
Ábreles tus oídos y escúchalos, escucha su risa fingida y escucha también su llanto desesperado pidiendo y suplicándote ayuda.
Ábreles tus ojos y velos, míralos, contempla su mirar y luego vuelve a míralos con ternura de amor y verás que la vida es Felicidad.
Ábreles tus brazos y abrázalos hasta romper sus esquemas, prejuicios y absurdos, qué más da, si a ti te los rompieron alguna vez, hazlos sentir amados… corre.
Simplemente ama, demuéstrales que tu mundo brilla y no se opaca con su presencia, anda ve demuéstrales que dar amor no cuesta nada y luego vuelve a repetirlo, no te canses, hazlo hasta el último suspiro de tu mundo brillante.
24/de junio/2018
Joselyin Guadalupe Alvarado Tamayo
Imagen: Pexels.com
