8 de octubre de 2018
Quisiera hacer más caminatas largas,
ver atardeceres,
comprarme más helados,
tener un gato,
escuchar más a Vivaldi,
¿qué tal Las Cuatro Estaciones y unos audífonos?
romper la dieta,
gritar: ¡te amo!,
poder llorar,
tomar tu mano y también saber soltarla.
Ir a Venecia, Suiza ¿qué tal Tokio?,
hacer pasteles y disfrutar su aroma,
café,improntas,
escribir poemas,
las crónicas de mis viajes,
vivir en el bosque,
tener más plumas que escriban de amores,
esperanzas, risas,
cantar canciones de amor en voz alta,
bailar más bajo la lluvia,
hacer más angelitos en la nieve,
visitar más Lake Tahoe en invierno,
y en cualquier fecha
el puente de San Francisco con o sin neblina
o cruzar el de Londres
y si de conocer más se trata,
quiero ir a Tiburón,
enojarme menos,
¡y sí ! que me canten al oído,
ser la autora de un best seller,
también la musa,
ser más loca, atrevida, más soñadora... más yo
Decir más no y atreverme a muchos sí,
columpiarme en un parque,
usar más tenis, maquillarme menos,
cortarme el pelo,
comprarme dulces,
ir más al cine, pero en sillones reclinables
y sin palomitas para poder abrazarte
poner mi cabeza en tu pecho
y pasar mi pierna sobre la tuya,
tener sueños y vivir de ellos,
ser menos ingrata,
subir montañas
y que aparezcan más panoramas,
más cosas, bellos paisajes,
¿o qué tal un venado?,
¿o un oso?
Sí, ver correr un río,
meter los pies,
ver los salmones brincando en contra,
escuchar el río y sentir su frío,
salpicar los pies.
Correr, caminar,
oler un campo de verdes pastos de tierra mojada,
seguir descalza y respirar el viento frío que va en contra,
ver las flores,
agitarme el pelo,
escuchar más pájaros, mares, ríos, silencio y más susurros,
más "te amo",
más música, serenatas, grillos, ¡violines!...
Menos malas noticias, menos pobrezas...
Ver tomarse de la cola a los elefantes,
escuchar sus trompetillas
y también ¿por qué no?
cómo se columpian en la tela de una araña.
Leer más a Borges, Simone, Kafka, Thoreau,
David Foster Wallace, Heidegger,
y sí, también a Salomon, David, Pablo....
sobre la túnica de colores y los sueños de José
y ¿por qué no? a Mafalda también...
¿O qué tal el autor de Las Cuatro Nobles Verdades?
Dormir más y correr menos,
y correr más y dormir menos,
ser más libre y menos esclava...
Quisiera vivir más y morir menos,
quisiera reír más y llorar más,
pero de felicidad, de gratitud, de alegría,
de satisfacción, de un orgasmo y no de una muerte...
¡y sí!, que si no fuera por “Él”,
amor, la esperanza y la fe, mi vida, ¿mi vida?
¡vida! ¿que sería la vida?
¡Qué sería el ser!
¿Que sería de mi alma?
¿de mi anochecer?
¿de mis sueños?
¿del amanecer?
¿ y del ayer sin Él?
Lisette Angulo. Soñadora, alegre, apasionada en todo, amante de los viajes. Escribe sobre la vida.
