30 de Mayo de 2018
En los asuntos pequeños confía en la mente, en los grandes en el corazón.
Sigmund Freud
El día de hoy, 20 de mayo, se celebra en nuestro país el Día del Psicólogo, el cual fue instituido por primera vez en 1998 como como un reconocimiento a los profesionales que se dedican a esa rama de la medicina. La fecha fue establecida por la Federación Nacional de Colegios, Sociedades y Asociaciones de Psicólogos de México y se eligió debido a que en ese día se otorgó la primera licencia para ejercer la profesión de psicólogo en México.
De acuerdo con la Facultad de Psicología, la enseñanza de esta carrera y la investigación psicológica en México se iniciaron y consolidaron en la Universidad Nacional Autónoma de México. En 1896, Ezequiel A. Chávez inaugura el primer curso de Psicología como asignatura independiente en la Escuela Nacional Preparatoria. Posteriormente, en 1937, una comisión integrada por Antonio Caso, Ezequiel Chávez, Francisco Larroyo y Eduardo García elabora en la Facultad de Filosofía y Letras el primer plan de estudios en Psicología, destinado a otorgar el título de Maestro en Psicología.
Para 1956, y por iniciativa del Dr. Guillermo Dávila se instaura el Doctorado Especializado en Psicología en el ahora Colegio de Psicología, el cual era una dependencia de la Facultad de Filosofía y Letras. Finalmente, en el año de 1960 la Universidad Nacional Autónoma de México aprueba el primer plan de estudios de la Licenciatura en Psicología. No obstante, fue hasta 1974 que se reconoció oficialmente a la carrera de Psicología, evento que permitió a los estudiantes tener derecho a una cédula profesional.
En la actualidad en México existen 12 psicólogos por cada 100 mil habitantes (cuatro veces menor que en Colombia, cinco veces menor que en Brasil y diez veces menos que en Argentina) y cada vez ganan más reconocimiento dentro del ámbito profesional como un especialista que puede aportar mucho a la salud de un individuo para que ésta sea íntegra; no obstante, la lucha de los psicólogos ha sido ardua en el país.
Etimológicamente la palabra psicología proviene del vocablo griego psykhé (psique) con el significado de alma, mente, aliento, vida y era representado simbólicamente con una mariposa, mientras que el sufijo -logia, describe al discurso, estudio, tratado, doctrina, etc.; por tanto, psicología significa literalmente “estudio del alma” y denota en consecuencia el “estudio de la mente”. La psicología se encarga de estudiar los procesos mentales en sus tres dimensiones: cognitiva (pensamiento), afectiva (emociones) y de comportamiento (conducta).
La palabra psicología fue utilizada por primera vez en lengua latina por el poeta y humanista cristiano Marko Marulić a finales del siglo XV o comienzos del XVI, también es citada en la obra del autor alemán, Rudolf Göckel, en Marburg en 1590. La primera referencia conocida en lengua inglesa de la palabra psychology se produce en la obra de Steven Blankaart en 1694. El término no ganó popularidad en el ámbito ilustrado hasta el uso de éste por el filósofo alemán Christian Wolff, quien lo empleó en sus obras Psychologia empirica (1732) y Psychologia rationalis (1734).
El origen de la Psicología fue la Filosofía, aunque el verdadero principio es remoto, porque desde que el hombre existe se ha cuestionado sobre sí mismo, sobre el mundo y sobre la posibilidad de trascendencia. Antiguamente no se llamaba Psicología, porque el conocimiento del hombre y el intento por encontrar respuestas válidas eran la Mitología, la Filosofía y la Religión.
La base de la psicología parte de las ideas de los filósofos griegos. Para Platón, el alma tiene tres partes o funciones: a) El alma racional: uso de la razón; b) Alma irascible: uso de sentimientos/pasiones (tristeza, alegría, cólera) y c) Alma concupiscible: los apetitos o los deseos (sexo, hambre, sed). Aristóteles dividía a la psique en tres tipos: vegetativa (de las plantas), sensitiva (de los animales) y racional (del hombre). Consideraba a la mente o psique como el acto primero de todas las cosas, lo que hace posible que sintamos y percibamos.
Es así, amable lector, que el hombre actual está sumergido en un remolino de situaciones que no entiende y la velocidad de los cambios lo trastorna y deprime. Necesita más que nunca encontrarse a sí mismo. El Psicólogo tiene una función social impostergable, ayudar a las personas a encontrar su centro y a aprender a confiar en su propio discernimiento.
Feliz día a todos los psicólogos de nuestro país.
Jorge Rodríguez y Morgado (jarymorgado@yahoo.com.mx) es catedrático universitario, conduce: ConoSERbien en Sabersinfin.com
Imagen: Tomada de Blogspot.